La bancada de Morena en el Congreso de la Ciudad de México ha decidido posponer la discusión sobre la despenalización total del aborto, pese a que el dictamen correspondiente fue aprobado en comisiones apenas tres días antes. Con el respaldo de algunos aliados como PRI, PT y MC, Morena contaba con la mayoría simple necesaria para aprobar las reformas al Código Penal que eliminarían los artículos 144, 145, 147 y 148, los cuales penalizan el aborto después de las 12 semanas de gestación.
Aunque la discusión estaba programada para la sesión del jueves, el tema fue retirado del orden del día. Legisladores de Morena explicaron que la decisión responde a la necesidad de lograr un mayor consenso político y social, aunque algunos diputados del partido manifestaron su descontento por el retraso. "Algunas compañeras querían que se discutiera de inmediato", comentaron legisladores consultados.
La división en Morena fue evidente para los diputados de otros partidos. La diputada del PAN, América Rangel, aseguró que hubo presión de la Iglesia y grupos provida, e insinuó que algunos diputados de Morena también se oponen a la reforma. Por su parte, Jesús Sesma, líder del PVEM y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), anunció que su bancada votaría en contra del dictamen, argumentando que el tema no fue sometido a foros y careció de un proceso de parlamento abierto.
El artículo 260 del Reglamento del Congreso local establece que los dictámenes aprobados en comisiones deben presentarse en el pleno en un plazo no mayor a 45 días, con una prórroga posible de otros 45 días. De no cumplirse, la iniciativa será archivada.
La coordinadora de Morena en el Congreso capitalino, Xóchitl Bravo, negó que el tema se vaya a la "congeladora" y explicó que la pausa es para buscar consenso. "Es una pausa, no una suspensión... Nos tomaremos el tiempo necesario para lograr acuerdos con todas y todos", declaró, sin garantizar una fecha específica para la votación en el pleno. Bravo también aclaró que ni Claudia Sheinbaum ni la jefa de Gobierno, Clara Brugada, ejercieron presión sobre la decisión, subrayando que ambas son feministas.
Alberto Martínez Urincho, presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, defendió la pausa señalando que se busca un consenso y no una imposición por mayoría. "No es un tema de números, es un tema de acuerdos", afirmó.
En las inmediaciones del Congreso, grupos feministas se manifestaron exigiendo la despenalización total del aborto, coreando consignas como “Fuera el aborto del Código Penal” y “Aborto sí, aborto no, eso lo decido yo”. Bravo anunció que en las próximas semanas se organizarán foros para combatir lo que calificó como una campaña de desinformación sobre la reforma.