Un nuevo temporal pone en alerta a España apenas dos semanas después de las devastadoras inundaciones del 29 de octubre, que dejaron más de 200 muertos, una treintena de desaparecidos y daños incalculables. Aunque se esperaba que las alertas aumentaran a partir de mañana, el nivel de riesgo en la provincia de Almería, en el sureste, ya fue elevado de amarillo a naranja debido a una intensa tromba de agua, que alcanzó 70 litros por metro cuadrado en menos de una hora, inundando calles, viviendas y carreteras.
El Centro de Coordinación de Emergencias informó que los mayores incidentes se han registrado en los municipios de Roquetas de Mar, El Ejido, Vícar y Balanegra. La alcaldesa de Balanegra, Nuria Rodríguez, explicó que la crecida de dos ramblas, alimentadas por el agua proveniente del municipio de Dalías, ha causado cortes en caminos y en un tramo de la autovía A-7.
"Al principio estábamos bastante asustados por la cantidad de agua que traía la rambla, pero ya ha comenzado a bajar. Ahora estamos evaluando los daños: los caminos están cubiertos de escombros, pero por suerte el nivel de las ramblas ha descendido y los daños se limitan a los caminos rurales y de acceso", señaló Rodríguez.
Las autoridades han pedido a los ciudadanos que permanezcan en sus hogares, reduzcan la velocidad si deben conducir, mantengan la distancia de seguridad y eviten áreas de riesgo como zonas bajas, pasos subterráneos, sótanos y áreas cercanas a canales y ríos, que podrían inundarse rápidamente.
Para mañana martes, se espera la llegada de una nueva borrasca y, posiblemente, una depresión aislada en niveles altos (DANA), un fenómeno meteorológico común en el Mediterráneo en esta época, pero con potencial de generar lluvias tan intensas como las del pasado 29 de octubre. Se prevén “fuertes y persistentes lluvias” en áreas de la vertiente mediterránea y en las Islas Baleares.
La Agencia Estatal de Meteorología de España recomienda a la ciudadanía que consulte regularmente la previsión del tiempo y los avisos meteorológicos actualizados en su página web, aplicación móvil y redes sociales, ante el carácter “potencialmente adverso” e incierto de esta situación.